ESOS HIJUEPUTAS

Ahí están otra vez esos hijueputas, hace dos meses el anónimo, ahora piensan amedrentarme con una corona funeraria y una tarjeta. Que mal gusto tienen los desgraciados. Me mandaron lo más barato del mercado, fascistas tropicales al fin y al cabo, aunque los muy cretinos se creen la guardia pretoriana de Calígula, pero en realidad lo que hacen es limpiarle las botas con la lengua a un tipo que a su vez le lame el culo a los Dioses de la esfera y gozan degustando la mierda divina, es por eso   que   andan cebados y  barrigones.

Esos hijueputas no me dan miedo, matarme no es tan fácil ¡Incluso les doy de comer!  Si no fuera por mí se estarían muriendo con un sueldo miserable. Por mí se dan “lujos”: Desde ponerle téticas a la mujer o la moza, hasta ir a conciertos de Jimmy Gutierrez o de Iron Maiden, y arrastrar su trasero por los pasillos de un centro comercial, exhibiendo una dignidad comprada con los mismos billetes con el que compran la cerveza y la comida rápida que se tragan.

Ay que tal esos hijueputas! Dizque asesinar con Z; y pensar que pertenecen a un organismo  de inteligencia.

Yo sé que esto lo hizo el mismo escolta que me mando el Estado, pronuncia mi nombre como si se escribiera con J; por encima se le ve lo vulgar. Cambia de turno con el otro pendejo, haciéndose un saludo callejero con la mano y chocando por último el puño, como si se fueran a sacar chispas con los huesos, de seguro le agradecen a Dios por tener trabajito, después de echarse puyas porque alguno de los equipos de futbol de los que son hinchas, quedo campeón venciendo al del    otro.

Sé que a estas alturas esos hijueputas, conocen las páginas que leo de los periódicos, el contenido de los correos electrónicos que recibí y envié, el color de mi orina después de beber cerveza, las veces que le llene de semen la cara a Raquel el ultimo mes. Eso les debió haber dado envidia, seguro se hicieron la paja mientras nos espiaban.

 

… El teléfono: ¿Alo? ¿Raquel? Dame un momento; es que esos hijueputas nos están escuchando. (Buenos días hijueputas, si me van a mandar flores y tarjetas funerarias a la casa, manden algo más decente, para la próxima quiero tulipanes en lugar de margaritas y ¡Por favor! Mi nombre se escribe con H, no con J y asesinar se escribe con S ¡No con Z!) ¿Raquel, seguís allí? Bien. No, no me da miedo y publicare el libro. No, ese no es mi objetivo, parece que no me conocieras, yo sé que ninguno de estos señores serán castigados por la justicia ¡JAJAJAJAAJ! La justicia en este país tienen tetas de silicona y le gusta mamar vergas envueltas en dólares. ¿Por qué hago esto? Bueno, por esto me pagan y aun no me aburre.

 

Nos vemos en el lanzamiento; no te preocupes no pueden hacernos nada más que ver como derramo mi semen en tu cara. Y una última cosa, lleva tulipanes. No, no son para mí, son para esos hijueputas, Edgar y Edwin, la escolta.

 

Náusea Dvida